Un grupo de investigadores (Zhong y col. 2014; Eur J Epidemiol, 29(6),
391-404), realizó un metaanálisis sobre la relación entre Actividad Física y mortalidad de cáncer de mama. Se seleccionaron un total de 16 estudios relevantes con una muestra por encima de 40.000 pacientes de cáncer. Los resultados determinaron una relación inversa entre la práctica de ejercicio físico y la mortalidad no sólo por cáncer de mama, sino también por todas las causas.
Los resultados seguían siendo positivos independientemente de si el ejercicio se había practicado antes o después de la enfermedad, cuando se estratificaba por IMC> 25(Índice de Masa Muscular) o estado menopáusico.
Para aquellas mujeres supervivientes de cáncer de mama que anteriormente a la enfermedad habían sido sedentarias, estos resultados deben suponer de estímulo y acicate para incluir el ejercicio como rutina habitual.
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